Hoy toca un post totalmente diferente a lo que os tenemos acostumbrados, hoy voy a hablaros de vino!
Reconozco ser una apasionada del enoturismo, no sólo por probar nuevos vinos, sino por conocer la historia de sus bodegas y sus procesos de producción. El fin de semana pasado escogí hacer ruta por Ribera del Duero. Es una zona preciosa, no sólo tiene unos vinos increíbles, también sus bodegas son impresionantes! Cuando estás en el coche y ves esas majestuosas “mansiones” en medio de sus viñedos, te entran ganas de pararte en todas!
No obstante, hubo una que me impresionó más que las demás, la bodega del Pago de los Capellanes. No sé si es por sus vinos, por su arquitectura moderna o por la pasión y orgullo con la que nos mostraban su bodega. Pero os puedo asegurar que me enamoró! Su “sala” de barricas es ESPECTACULAR! Sus barricas se ven desde arriba a través de grandes cristaleras, con una sucesión de arcos de hormigón, es impactante!
Causa admiración que una bodega tan reciente, haya conseguido colocar sus vinos en las listas más prestigiosas y con muy buenas puntuaciones. Se fundó en 1996, cuando el matrimonio formado por Paco Rodero y Conchita Villa deciden abandonar Barcelona para volver a los orígenes del señor Rodero y crear la bodega.
El Pago de los Capellanes tiene 8.000 metros cuadrados construidos, distribuidos en diferentes zonas que se han ido construyendo en diferentes años. Por ejemplo, el edificio social, dónde se reciben las visitas y se encuentra la tienda de vinos y zona de catas, se construyó en el año 2010.
Su gama de productos consta de cinco vinos elaborados con 100% tempranillo: Joven Roble, Crianza, Reserva y dos vinos de parcela: Nogal y Picón, sus vinos más especiales. Éste último está hecho con uva de una única parcela, en forma de pico, de ahí su nombre, y su precio en tienda ronda los 115 euros (en un restaurante lo llegué a ver marcado a 220 euros).
Es un vino que conozco desde hace tiempo, y disfruto mucho con su intenso sabor; creo que ahora que conozco su bodega, me va a gustar más!
Como es un blog de restaurantes, no podemos dejar pasar comentar dónde ir a comer después de la cata de vinos. Nosotros fuimos a la plaza mayor del pueblo, al lado de la Iglesia, hay un bar de pinchos, buenísimos! Hasta me olvidé de sacar fotos! No os puedo decir el nombre porqué no estaba en la puerta, pero lo veréis, tiene unas columnas enfrente. El sitio nos lo recomendó el propietario de la bodega, el señor Paco Rodero.
Si vais, ya me contaréis si os ha impresionado tanto como a mi!
Bodega Pago de los Capellanes
Dirección: Camino de la Ampudia S/N – Pedrosa del Duero (Burgos)
Teléfono: 947530068
Fax: 947530111
Web: www.pagodeloscapellanes.com
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Pasión Gastronómica 