¡ESPECTACULAR! Así resumo mi visita a Tast a la Rambla.
El sábado al mediodía nos fuimos mi hermana y yo a pasar un “día de Sisters” por la Rambla. Nos lo pasamos muy bien y comimos estupendamente a un precio muy interesante.
Esta iniciativa gastronómica nos ha brindado la oportunidad de conocer restaurantes de nuestra ciudad que no conocíamos, y de llenar nuestra “libreta” con un montón de direcciones pendientes para nuestras próximas salidas gastronómicas.
En Tast a la Rambla, cada tapa vale 4,5 euros, pero si coges cuatro te salen a 16 euros. Nosotras cogimos doce “tickets”, y dos copas de vino. En total nos salió la comida por 58 euros las dos! Ideal!
Empezamos por el Bocadillo de ibérico con salsa de huevo del Eggs; buenísimo! Llena muchísimo y el sabor de la carne con el pan calentado al momento está muy bueno.
Las Bravas Bohèmic, del restaurante que lleva su nombre, también espectaculares, y por 4 euros la ración era muy completa, nunca las habíamos probado y la verdad que nos encantaron!
Continuamos con Chipirones confitados con cebolla y tomate de Freixa Tradició, estaban buenos pero para mi gusto, demasiada salsa, se agradecía el pan que acompañaba el plato.
Nos pasamos a la cocina de autor:
Sigo soñando con la Ostra francesa con salsa ponzu del Espai Kru, claramente uno de mis platos favoritos de la jornada.
También del mismo restaurante, probamos el pescado blanco en ceviche con leche de tigre de maracuyà, riquísimo, como me gusta el sabor de la fruta de la pasión.
El Mojito japonés del Dos palillos, era delicioso, más propio para postre, pero con el calor que hacía en las Ramblas, algo tan refrescante nos sentó genial.
Otro de plato excelente fueron los mejillones con verduritas y salmorejo texturizado de la Taberna del Clínic, tanto la presentación del plato, como su sabor y textura lo convierten en uno de los mejores platos del evento.
La trufa negra nacida de mar y montaña del Nectari, fue el que más me decepcionó, casi no sabía a trufa, era una bolita de bacalao, demasiado hecho para mi gusto.
Antes de pasar a los postres, cogimos unos Calamares a la andaluza con mayonesa cítrica del The Mirror, buenísimos.
Nos quedaban 2 “tickets” para los postres, y aunque al principio no nos decidíamos, al final acertamos.
El Hot dog Escribà, parecía tan real, pero el Frankfurt era chocolate con leche, y la crema catalana y crema de frutos rojos simulaban la mostaza y el ketchup. Original, verdad? Estaba riquísimo!
Y para acabar el Mojito Splash de Bubó. ¡Nos encantó! Refrescante, sabroso y buenísimo.
Nuestra velada no acaba aquí, a las 5 empezaba el taller de piruletas dulces, de la mano de Cristian Escribà. Diez minutos antes de empezar, hasta que acabó la conferencia no pararon de servirnos coca de Sant Joan del maestro pastelero. Es la coca más buena que he probado en mi vida, suerte que controlé mi gula y tomé sólo dos trozos.
En vez del “curso” de piruletas dulces, el señor Escribá cambió de idea, y nos contó un proyecto que tenía guardado en secreto, su parque temático de chocolate y pastelería que se celebrará en Singapur del 20 al 24 de agosto de este año. Palabras textuales del maestro: ”Se coge “Charlie y la fábrica de chocolate”, “Alicia en el país de las maravillas”, “Petes Pan y el País de Nunca Jamás”, lo pones en una coctelera, lo mezclas bien y sale: Fantasía de Escribà!”Es una idea brillante! 8.000 metros cuadrados de fantasía pastelera con cascadas de chocolate de 8 metros de altura, ríos de chocolate, animales de merengue, y unas Ramblas simuladas con sus tiendas: joyerías dulces, zapaterías de chocolate,…
¿Por qué en Singapur? Allí creyeron en el proyecto, pero su ilusión es algún día tenerlo en su tierra. Hago un llamamiento a la Generalitat, en vez de tantas promesas de “hoteles, casinos, parques de atracciones…” por qué no un Fantasía Escribà?
Después de conocer los sueños del genio pastelero, nos quedamos a una clase magistral de Carles Gaig, nos cocinó, y enseñó como hacerlo, un “bacallà a la llauna”. La manera como lo contaba parecía fácil y todo, aunque estoy segura que es imposible que me salga igual de bien; aunque la clase me sirvió para quedarme con algunos de sus trucos y consejos.
El día fue genial, comimos “como en un restaurante de estrella Michelín” por menos de 30 euros, fuimos a conferencias de los mejores cocinero/pasteleros, nos lo pasamos increíblemente bien. Gracias C.
Os vuelvo a dejar la página Web dónde podéis ver todas las propuestas gastronómicas. Hoy acaba esta primera jornada de Tast a la Rambla, pero todavía os quedan unas horas, no dejéis pasar esta maravillosa experiencia.
http://tastalarambla.cat/pdf/Tast_a_la_Rambla-Programa_de_ma.pdf
S